Tipos de mascarillas más comunes

Cuando respiramos, hablamos y/o estornudamos, expulsamos aerosoles, que son estas partículas microscópicas que se quedan flotando en el aire, estas pueden estar contaminadas con Coronavirus, aunque seas asintomático. La única manera de protegernos es con las mascarillas y midiendo el CO2 cuando estemos en lugares cerrados, como salones de clase.

Las mascarillas son todo un tema. Pasaron de ser una necesidad a una moda y luego a una necesidad nuevamente. Pero, ¿cuáles son las más comunes o tengo a mi alcance? ¿Cuál es la más efectiva contra el COVID-19? ¿Cuál debería de comprar si no quiero contagiarme o contagiar a todos, en caso de ser asintomático? Sigue leyendo para averiguarlo.

Mascarillas de tela

Con este tipo de mascarillas hay que tener cuidado, ya que pueden fabricarse de distintos tipos de tela y pueden no estar reguladas o estar bien confeccionadas. No importa qué tan bonitas se vean o si te encanta el diseño, piensa en tu seguridad primero. Procura usar mascarillas de tela que:

  • Tengan un buen ajuste en la nariz y la boca, sin fugas.
  • Estén hechas con múltiples capas de tela respirable y de trama cerrada.
  • Incluyan una varilla nasal para adaptarse a la forma de tus pómulos.
  • Utilice tela que bloquee la luz al colocarla a contraluz.
  • No incluyan una válvula de respiración, ventilación u otras aberturas.
  • No estén fabricadas con una capa de tela delgada.
  • Queden espacios abiertos a los lados de la cara y la nariz.

Este tipo de mascarillas protegen excelente sólo si están hechas con todas las medidas anteriormente mencionadas. De lo contrario, no serán tan efectivas y el riesgo de contraer Coronavirus será alto.

Mascarillas quirúrgicas

También conocidas como mascarillas desechables, son las más fáciles de conseguir, prácticamente las venden en cualquier lado. Aunque sean las más comunes, no significa que cumplan todos los estándares. Recomendamos utilizar mascarillas quirúrgicas que:

  • Tengan un buen ajuste en la nariz y la boca.
  • Incluyan varilla nasal ajustable.
  • Estén hechas con múltiples capas de material no tejido.
  • No presenten espacios a los lados de la cara o nariz.
  • No tengan un material sucio o húmedo.

Es recomendable utilizar estas mascarillas una vez y luego desecharlas; sin embargo, es posible reutilizarlas, procure lavarlas y desinfectarlas de acuerdo con las instrucciones del fabricante.

Para una mejor protección, se recomienda utilizar una mascarilla quirúrgica y encima una de tela.

Mascarillas KN95

Diseñadas, probadas y aprobadas por cumplir con los estándares internacionales, son evaluadas por el NIOSH (Instituto Nacional para la Seguridad y Salud Ocupacional), que requiere estándares de calidad. De hecho, filtran hasta el 95% de las partículas del aire.

NO se deben utilizar las mascarillas KN95 si:

  • Tienes ciertos tipos de vello facial.
  • Cuentan con válvulas de respiración o ventilación.
  • Se te dificulta respirar.
  • Están mojadas o sucias.
  • No ajustan correctamente al rostro.
  • Fue lavada previamente sin seguir las instrucciones del fabricante.
  • No cuentan con dos correas para sujetar detrás de la cabeza.
  • No tiene un puente nasal adaptable.
  • Tienes otra mascarilla o doble mascarilla.

¡CUIDADO! Con las falsificaciones, puedes visitar su página web con factores para tener en cuenta a la hora de comprar una.

Estos son los 3 tipos de mascarillas más comunes. Desde luego existen otras más caras, no obstante, estas son las que podemos encontrar y conseguir con facilidad para protegernos. De igual manera, no te olvides de ventilar. No te quites la mascarilla aunque tengas las ventanas abiertas mientras haya gente a tu alrededor. Utilizar la mascarilla es tan importante como lavarte las manos.

Cuídate y cuida a los demás utilizando tu cubrebocas, sobre todo estando en espacios cerrados. Y no olvides medir los niveles de CO2 para asegurarte de que el lugar esté bien ventilado, ¡la medición puede salvar vidas!